Montse
Javier Benítez, investigador del Centro Nacional de Investigaciones
Oncológicas (CNIO), fue uno de los protagonistas del Simposio
Internacional “Los próximos 20 años en la investigación de los
telómeros”, celebrado esta semana en la Fundación Ramón Areces de
Madrid. En su especialidad, la relación de la longitud de los telómeros y
el cáncer hereditario de mama y ovario, ha aparecido un nuevo invitado:
el fenómeno de anticipación en el diagnóstico.
¿Cuál es la importancia del acortamiento de los telómeros en el cáncer de ovario o de mama familiares?
En estos tipos de cáncer los telómeros se caracterizan porque tienen una mutación en un gen (BRCA1 y BRCA2).
Las personas que tienen esa mutación la van transmitiendo de una
generación a otra y esto provoca una mayor susceptibilidad a desarrollar
el cáncer. A medida que pasan las generaciones, el telómero se va
acortando y ese acortamiento está relacionado con la edad de aparición
del tumor, cuánto más corto sean los telómeros, el tumor aparecerá a una
edad más temprana.